Otra melodía,
otra carnicería,
otra copa fría,
sopla mis angustias, amada mía:
Eurídice,
por favor guíeme
hasta el final
por favor
no me hagas mirar atrás
atrás quiero dejar
este infierno de estatuas
este invierno de metralla
quebró la flauta
que dio esperanza
antaño a cada paso
pasaron los años
más amos, más esclavos
pasaron los años
soñador solitario
que sueños le robaron
cuál lobo estepario
¿a qué dioses evoco?
¿a qué dioses imploro?
¿a qué dioses lloro?
dioses marchaos !
somos nosotros los de los logros
escuchad
los coros de los que besamos el plomo
cantad al roto horizonte
somos la agonía de Antígona gritándole a Creonte
a señorías y condes
que se esconden entre hombres
de barriga vacía
y espalda partida
mostrad rebeldía
que ha de traer justicia
aunque nos cueste la vida
falsos puños con rosas
sentirán las espina
esta noche me enfría
como cuando me mira
la puta de la esquina
princesa presa de esa acera
érase una vez la tierra
exenta de condenas
de cadenas a penas
como quién besa sin pasión
donde tú y yo
ya no nos miramos
pero todo va mejor
pero todo va mejor
porque
amada mía
ayer regalé versos a otra mujer
querida poesía
juro que no te volveré a vender

cada rima es complejo de Electra
desea volver a mi cabeza
repta, se acerca
seduce, susurra
a mis orejas
cientos de malas ideas
para hombres buenos
con mucho tiempo
y manos inquietas
a veces una línea recta
es mal atajo para los problemas
el camino de baldosas amarillas no termina
de puntillas encima del muro, busco a mi familia
amigos, testigos de mi desidia
los que mi ira alejó
los que acudieron al baile
algo extraño hay en el aire
condenado a vagar por Tierra de Nadie
donde círculos de moscas vuelan en enjambre
donde el artista del hambre
redime su culpa de ser un ser humano
más no habrá lanista que dome al Espartaco
y si he de rezar a un dios que éste sea Baco
ante el barquero responderé que no llevo suelto
porque no cobré por mi trabajo
pero pagué por mis actos

Otra melodía,
otra blusa descosida,
otra musa sin caricias,
otra ruta hacia Ítaca,
las mismas zapatillas sucias.

Otro bolígrafo gastado,
otro Ícaro enjaulado,
otro zángano coronado,
el mismo peldaño.